Entre la variedad de atracciones turísticas que no te puedes perder en Milán, está el Castillo Sforzesco que originalmente era una estructura militar construida en el siglo XV.
Caracterizado por sus enormes murallas, sobre las que se yerguen altas torres, el Castillo Sforzesco tiene un gran patio abierto al público, por el cual puedes acceder directamente al Parque Sempione, uno de los espacios verdes más grandes de Milán.
Hoy, las salas del Castillo Sforzesco albergan algunas de las instituciones culturales más importantes, como el Museo de Egipto, el Museo de Instrumentos Musicales, o la Galería de Arte y el Museo de la Prehistoria. Por todo ello, este lugar se cuenta sin duda entre los polos culturales más importantes de Milán.