Cualquiera que visite Sicilia quedará impresionado por sus paisajes, dominados por el Monte Etna, el volcán más alto de Europa, símbolo de la isla. En 2013 el Etna fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
Su superficie se caracteriza por una rica variedad de ecosistemas en los que se alternan los paisajes urbanos, los densos bosques y áreas desoladas, cubiertas de roca volcánica y periódicamente cubiertas de nieve.
Frecuentes ha sido las erupciones que se han sucedido a lo largo de la historia, cambiando el paisaje del que está consideradouno de los más espectaculares parques naturales del mundo.