Construido por Giorgio Vasari en 1564 por orden de la Familia Medici, el Corredor Vasario es un pasillo elevado que conecta el Ponte Vecchio con la nueva residencia del Palacio Pitti.
El Corredor Vasario alberga en su interior más de mil pinturas, todas de los siglos XVII y XVIII, así como una importante colección de autorretratos.
La entrada al Corredor Vasario está ubicada en la primera planta de la Galería Uffizi, sibien organizada en un área diferente: su discreta puerta a menudo pasa desapercibida para la mayoría de los visitantes que a diario atestan la Uffizi, ignorando que tras esa insignificante puertecita hay un gran tesoro (que sólo puede visitarse mediante reserva y con un tour con guía).